A la hora de hablar del analisis de datos, es habitual confundir los términos. Para aclarar cualquier duda al respecto, se ofrecen todas las claves al respecto.
¿Qué es una métrica?
La encargada de establecer un parámetro para que pueda medirse el rendimiento de los datos de una empresa. Cada KPI (indicador clave de negocio) tiene como base una métrica concreta. Es importante elegir bien cuáles son las métricas para conocer, de forma directa, cuál es el funcionamiento de la empresa.
Definición de datos
Recibe este nombre la combinación de cálculos o informaciones que se ajustan a una métrica concreta. Es imprescindible obtener datos de calidad, ya que de ellos dependerá que las métricas sean más concretas y que sea posible corregir los posibles errores.
El análisis de datos
Tras obtenerse las métricas, es el momento de comprobar si hay una serie de patrones que se repiten en los datos. Estos deben analizarse desde un punto de vista objetivo para encontrar cuáles son las medidas que deben adoptarse para corregir tendencias poco recomendables para la empresa.
Cuanto más detallado sea el análisis, más sencillo será encontrar cuál es el estado real de la empresa y, sobre todo, cómo afrontar las tendencias futuras con más garantías de éxito. Sin duda, tras diseñar la solución correspondiente se debe monitorizar el tiempo que tarda en ser eficaz y en cambiar la métrica. Un segundo análisis debería confirmar el cambio de tendencia.
¿Por qué los tres aspectos anteriores son inseparables?
Porque es imposible obtener una métrica sin datos. Sin métrica no es posible conocer cuál es la tendencia predominante y sin análisis no es factible detectar cómo interactúan los datos.
Obtener una métrica y no analizarla es una pérdida de tiempo. Analizar cada proceso con un objetivo final ayuda a avanzar y a prever posibles alteraciones en el ritmo normal de la empresa. Así, es imprescindible contar con métricas, y un posterior análisis, como:
- El CAC o costo de adquisición por cliente. Permite saber cuánto cuesta convertir a un cliente potencial en uno real.
- La tasa de conversión.
- Si los clientes están satisfechos o no con el producto o servicio adquirido.
- El LTV o lifetime value que concreta cuánto dura tu relación con cada cliente.
- El retorno de la inversión realizada y cómo se traduce en el nivel de beneficios obtenidos.
- La comprobación de la tasa de rebote en relación con la fidelización que genera la página web.
La combinación de todos los factores anteriores da como resultado un informe que ayuda a mejorar la adaptabilidad de cualquier empresa a su realidad diaria. Somos especialistas en el analisis de datos en Canarias. Para saber más, solamente hay que contactar con nosotros y comenzar así una etapa comercial mucho más próspera.